El presidente ruso, Vladimir Putin, acaba de cometer otro acto incomprensible al montar una fiesta gigantesca en un estadio con miles de personas presentes donde se alababa por el gran trabajo que las fuerzas militares rusas están ejecutando.
Esta semana, misiles rusos impactaron refugios en Ucrania que guardaban niños en lo que la semana pasada un hospital de maternidad fue impactado por cohetes.
Como si fuera poco, franco tiradores rusos han estado asesinando a ucranianos por solo pararse en fila para recibir un pedazo de pan.
Las atrocidades que Rusia está cometiendo en Ucrania no se ha visto desde los tiempos de Hitler durante la segunda guerra mundial.
Interesantemente, su transmisión en la televisión fue abruptamente interrumpida y tumbada y muchos ya están especulando que quizás unos hackers estarán detrás de eso.